Un Corazón Limpio

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.

Salmos 51:10

Qué pedido tan honesto y tan importante. Crea en mí un corazón limpio.

Nosotros estamos creciendo diariamente. Nuestro corazón no esta en su estado final aun tenemos oportunidad de moldearlo. Por eso es que el curso inicial muchas veces queda en el pasado, como una memoria distante. Y sin darnos cuenta nos vamos desviando de la intención original.

Constantemente debemos de examinar la motivación de nuestro corazón. Yo he notado que muchas veces aquello que empezó como un deseo de ayudar, ahora se ha convertido en una frustración y en lugar de edificar mi vida y la de los demás, sólo nos está frustrando a todos.

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Aprovecha el día hoy

Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría.

Salmos 90:12 

Creo que hay algo que todos lamentaremos en los últimos momentos de nuestra vida. Y esto será el no haber aprovechado aquellos momentos únicos y el haber mal gastado tanto tiempo.

Habemos muchos que hemos perdido un número incontable de días o hasta años porque no supimos aprovechar bien el momento que estábamos viviendo.

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Ya fuimos salvos, recibimos a Cristo como nuestro salvador, ¿Y ahora qué? De aquí para donde agarramos.  La mayoría busca su banca y empieza su carrera de largos años asistiendo a la iglesia para escuchar sermón tras sermón.  (more…)

Así como el junto va con el pegado, la oposición va con la obediencia. Hay tanta gente convencida que si es propósito de Dios será fácil.  Y por ese motivo se han perdido de grandes bendiciones porque como no fue fácil, asumieron que no era propósito de Dios y desistieron. 

Es importante saber qué media vez nosotros recibimos la dirección de Dios es importante obedecerla.  La dirección recibida departe de Dios no es negociable.  Muchas veces pensamos que el milagro esta en lo que se hace, pero el milagro esta en el acto de la obediencia.  

Dios tiene cosas grandes planificadas para nuestra vida y futuro.  Y todo aquel que este dispuesto a tener la fe para creerlo y obedecerlo, sera quien disfrutara de la recompensa. Pero para obedecer tendremos que aprender primero a escuchar.